Hace ya dos años que un grupo de amigos que tenían como objetivo el fortalecimiento de la representación estudiantil en la PUCP decidieron formar Coherencia Universitaria. Su idea siempre fue que una representación estudiantil sólida, que trabaje por el bienestar tanto de los alumnos como de la sociedad de la que forma parte, sólo puede generarse mediante el trabajo a largo plazo. El objetivo, pues, siempre fue que Coherencia Universitaria trascienda a sus fundadores. Para ello era necesario generar una identidad y tener capacidad de renovación.

Nuestro gran logro este segundo año ha sido consolidar una identidad de la cual nos sentimos orgullosos. Vemos, pues, con satisfacción y, sobre todo, con la responsabilidad que ello implica, que la propuesta de Coherencia Universitaria es respaldada por un sector importante de alumnos. Nuestra identidad se ve fortalecida por el compromiso con el que todos los miembros de Coherencia Universitaria hemos asumido nuestros principios. Es este compromiso el que ha permitido que este año, en que nuestra agrupación ha sido puesta a prueba varias veces, hayamos demostrado que podemos superar cualquier dificultad y salir adelante.

También ha sido un año de renovación. Hoy vemos nuevos rostros junto a nosotros: son personas que se han sentido identificadas con la agrupación y comparten el mismo compromiso que tuvieron los fundadores. Hemos, pues, consolidado un grupo humano que comparte objetivos comunes. Es por ello que hoy, quienes conformamos este maravilloso grupo humano que es Coherencia Universitaria, debemos recordar dos motivos más para proseguir con nuestro trabajo. Primero, que Coherencia Universitaria significa la concreción de un sueño de varios de nosotros. Segundo, que, para muchos futuros alumnos, Coherencia Universitaria determinará su primera impresión de lo que es la política y, por tanto, si verán en ella un espacio en el que es posible realizar ideales y generar bienestar colectivo. Es en este sentido que tenemos una doble responsabilidad que asumir. Teniendo esto en cuenta, recordemos que quienes hoy conformamos Coherencia Universitaria también debemos tener como objetivo que la agrupación trascienda nuestra etapa de estudiantes universitarios.

Finalmente, nos toca agradecer a quienes han hecho posible estos dos años: a los miembros y ex-miembros de Coherencia Universitaria; a los amigos que han acompañado y respaldado este proyecto desde su inicio; a todos aquellos quienes propician el debate y, con ello, nos permiten afianzar nuestra postura y generar propuestas novedosas; y, sobre todo, a los alumnos de la PUCP, pues es por ellos por quienes siempre trabajaremos.

El camino recién está empezando ¡Construyámoslo juntos!

Eder Rojas

Secretario General

Coherencia Universitaria